Los tres adjetivos del título son aquellas cualidades que actualmente creo que pueden definir a una persona. Aunque no soy de los que intentan encuadrar a cada cual en un marco, creo que esto es mas bien un listón de medida para uno mismo.
Complejo:
Se explica por si solo, es esa forma de expresarse que nos hace creer únicos, totalmente ininteligibles para todo ser mortal, excepto para una especie de deidad propia que justifica nuestros actos, pensamientos y nuestra vagancia por hacernos entender. Es aquel impulso que en el rechazo social nos hace pensar que nuestra complejidad y profundidad nos aleja del mundo.
Esta forma está en auge, aunque sea probablemente la mas cruel de todas.
Vulgar:
Es aquella forma de expresarse vaga y dejada, sin importancia de circustancias, en la cual uno se hace entender de forma precipitada, vaga y que normalmente consigue un efecto de rechazo.
Simple:
Para mi, esto es un ideal, algo que buscar siempre, que a veces surge y a veces no.
Es la forma de expresarse simple y llana, sin rodeos, acorde siempre a las circustancias y siempre sin esfuerzo, de manera natural y con ritmo.
Debo destacar que vulgar y simple puede ser sinonimos en ocasiones, pero no aquí. De echo, en este caso, vulgar esta mas cerca de complejo, ya que esto último se sirve de escusas vulgares.
Podría resumirse todo diciendo que vulgar, es aquello que se expresa sin necesidad, complejo aquello que se expresa de manera confusa, que exije mas esfuerzo del necesario, o en algunos casos la negación de algo sobreconocido, intentando ser ocultado con parafernalia barata.
La simplicidad es el hecho.
domingo, 15 de agosto de 2010
jueves, 5 de agosto de 2010
La responsabilidad del poder
Hoy, entrada cínica.
"Si una persona hace bien a 10 personas, y esas 10 personas a otras 10, al final saldrá algo bueno."
Eso oí hace poco, y me pareció bien.
Hablando con cierta persona, me dí cuenta de lo equivocados que vamos. Puede que fuera por lo crítico que soy con esa persona, pues ya me había dado cuenta en mi mismo, pero conmigo no fuí tajante.
Internet, se ha convertido en un arma muy potente, cualquier video absurdo, serio, o divertido, puede rodar por todo el globo.
Hoy, mientras esta persona me pasaba videos, yo me reía como el que mas. En cierto momento me pasó uno, en el cual un hawaiano gordo cantaba con un ukelele. La voz era aguda, y desentonaba con su físico. Mientras lo veía me daba cuenta de que no cantaba precisamente mal, y poco a poco fuí acallando mi risa para darme cuenta de lo que estaba haciendo. Estaba promoviendo el acto contrario a la frase del principio. Estaba haciendo que ese video fuera de persona en persona como motivo de risa, sin necesidad ni razón.
Pensé en como influía esto en la sociedad. Parece que solo cabe en las conversaciones hablar de terceras personas, de las que no conocemos motivos. Supongo que ocasionalmente esto es inevitable, pues hacer el payaso está muy extendido.
Pero si el tiempo que usamos en extender estas cosas, que consideramos estúpidas y vacías lo usasemos en otras cosas, estoy seguro de que sería mejor. La culpa de que siempre nos acabe llegando a nuestras manos asuntos huecos, sin valor, es nuestra, porque es lo que promocionamos.
http://www.youtube.com/watch?v=V1bFr2SWP1I
"Si una persona hace bien a 10 personas, y esas 10 personas a otras 10, al final saldrá algo bueno."
Eso oí hace poco, y me pareció bien.
Hablando con cierta persona, me dí cuenta de lo equivocados que vamos. Puede que fuera por lo crítico que soy con esa persona, pues ya me había dado cuenta en mi mismo, pero conmigo no fuí tajante.
Internet, se ha convertido en un arma muy potente, cualquier video absurdo, serio, o divertido, puede rodar por todo el globo.
Hoy, mientras esta persona me pasaba videos, yo me reía como el que mas. En cierto momento me pasó uno, en el cual un hawaiano gordo cantaba con un ukelele. La voz era aguda, y desentonaba con su físico. Mientras lo veía me daba cuenta de que no cantaba precisamente mal, y poco a poco fuí acallando mi risa para darme cuenta de lo que estaba haciendo. Estaba promoviendo el acto contrario a la frase del principio. Estaba haciendo que ese video fuera de persona en persona como motivo de risa, sin necesidad ni razón.
Pensé en como influía esto en la sociedad. Parece que solo cabe en las conversaciones hablar de terceras personas, de las que no conocemos motivos. Supongo que ocasionalmente esto es inevitable, pues hacer el payaso está muy extendido.
Pero si el tiempo que usamos en extender estas cosas, que consideramos estúpidas y vacías lo usasemos en otras cosas, estoy seguro de que sería mejor. La culpa de que siempre nos acabe llegando a nuestras manos asuntos huecos, sin valor, es nuestra, porque es lo que promocionamos.
http://www.youtube.com/watch?v=V1bFr2SWP1I
Suscribirse a:
Entradas (Atom)